De temporada… los cítricos y su aporte de vitamina C

Los cítricos ahora están en su mejor temporada, más sabrosos y económicos, vamos a sacarle jugo a todos sus beneficios. Se incluyen en este grupo naranjas, limones, mandarinas, pomelos o limas. Destacan por su elevado contenido en vitamina C (o también llamada ácido ascórbico), un nutriente vital para el correcto funcionamiento del organismo.

Los cítricos, como las demás frutas, contienen azúcares, fibra, vitaminas y minerales. Destacan especialmente por ser fuente de vitamina C o ácido ascórbico, micronutriente que desempeña funciones muy importantes para la salud. Contribuye al funcionamiento normal del sistema inmunitario, del sistema nervioso y de la función psicológica; ayuda a la formación del colágeno para el funcionamiento normal de la piel, dientes y encías; contribuye a la protección de las células del daño oxidativo; ayuda a disminuir el  cansancio y la fatiga; y mejora la absorción del hierro, entre otras cosas. ¡Propiedades, todas ellas, ideales para estos días en los que ya estamos a pleno rendimiento!

Cuando pensamos en un alimento rico en vitamina C, se suele relacionar con los cítricos como la naranja, pero hay muchas otras frutas y verduras ricas en este nutriente. Por ejemplo, las fresas, las grosellas, los kiwis, las papayas y otros cítricos, como las limas o los limones, que son más ricos en vitamina C que las naranjas. Los mangos, los arándanos, las frambuesas, las mandarinas y las nectarinas también destacan por su aporte en ácido ascórbico. Incluso verduras como el pimiento o el tomate.

Pero hay que tener en cuenta que esta vitamina es muy frágil y deja de realizar sus funciones cuando, por ejemplo, se cocina. La vitamina C también pierde su actividad cuando entra en contacto con el oxigeno. Así pues, es bien cierto que un zumo de naranja debe tomarse en el menor tiempo posible después de ser exprimido, para que mantenga al máximo su aporte vitamínico. Ocurre lo mismo si se prepara una ensalada de frutas. ¡Cuánto antes se coma después de prepararla, más nutritiva será!

Para cubrir las necesidades de vitamina C se debe seguir una alimentación variada y equilibrada. Pero, especialmente, se debe hacer hincapié en que una de las 2-3 raciones de frutas diarias sea rica en vitamina C. Sin olvidar que como mínimo una de las dos raciones de verduras sea cruda.

Los cítricos también pueden formar parte de recetas, una manera distinta y sabrosa de tomarlos: pollo asado con pomelo, dorada con envoltura de jamón serrano Argal y naranja, o un bizcocho de limón con batido de fresas y yogur ¡para tus desayunos especiales!