El desayuno, propiedades y ¡nuevas ideas!
Para empezar el día con vitalidad, comienza con un desayuno de lo más completo y variado. El organismo necesita energía y nutrientes para realizar correctamente las actividades diarias: el colegio, el trabajo, el deporte… Un desayuno equilibrado ayuda a mejorar el estado nutricional, aumenta el rendimiento físico, incrementa la concentración y la memoria, da alegría y buen humor, ayuda a controlar el peso y es un buen hábito para toda la familia.
A pesar de todas estas bondades, algunos autores en las redes sociales y seguramente buscando generar ruido, minimizan la importancia de éste. Nuestra recomendación es aplicar el sentido común, basar nuestra dieta en alimentos frescos, naturales, saludables y mínimamente procesados y pasar de las modas que vienen y van, de la publicidad y de los alimentos superfluos procesados, ricos en grasas “malas” y azúcares que no nos convienen. No debemos hacer caso a las estrategias de marketing que nos explican las “bondades” de ciertos alimentos, has visto algún anuncio que explique los beneficios de tomar ¿naranjas? o ¿lechuga? o ¿calabaza?.
Pero vamos a ser prácticos ¿qué debe incluir un buen desayuno?
El desayuno debe incluir alimentos de los diferentes grupos, con muchos ingredientes y en poca cantidad. Lo ideal es combinar un alimento del grupo de los farináceos (cómo pan, tostadas, müesli, avena… aunque también puedes ponerle hummus o arroz), un alimento del grupo de los lácteos (cómo leche, yogur o queso tipo fresco o tierno) y fruta. También se puede complementar con otros alimentos proteicos como el jamón o el pavo cocidos Bonnatur de Argal, con frutos secos, huevo (tortilla francesa o de espinacas…), atún… y porque no, vegetales como puré de aguacate en pan, o lechuga y tomate en un bocadillo… Se puede consumir en una toma o repartido en dos, al levantarse y/o a la media mañana, según el tipo de vida, los horarios o del apetito…
A continuación, os dejamos 5 ideas saludables para el desayuno:
1- Un vaso de leche, con dos tostadas de pan con aceite y pulpa de tomate, una o dos lonchas de pavo cocido Bonnatur y una naranja.
2- Un bol de yogur con copos de avena, semillas de chía, plátano y frambuesas, nueces, con un té verde.
3- Batido con bebida vegetal de coco y fresas, con dos rebanadas de pan de centeno con queso fresco y aguacate.
4- Un sándwich mixto especial con brotes de espinacas y dátiles , con 2 kiwis y un café con leche.
5- Un bizcocho casero de manzana con rodajas de plátano y crumble de avellanas y leche con canela.
Las combinaciones son infinitas. Aunque el típico pan tostado o con tomate y aceite de oliva está riquísimo, te recomendamos que dejes volar tu imaginación y ¡pienses nuevas ideas!
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