Isabel Holguín

¿Es el desayuno la comida más importante del día?

Isabel Holguín

¿Es el desayuno la comida más importante del día?

15/12/2022

Seguro que has crecido pensando que el desayuno es la comida más importante del día. Lo decían nuestras madres y abuelas, que no consentían que fuésemos al colegio con ‘el estómago vacío’, y también eran muchos los expertos que alertaban de los peligros o contraindicaciones de empezar nuestra jornada sin ingerir ningún alimento. Con este pretexto, los niños de los 90 empezábamos nuestros días con grandes dosis de azúcar en sangre debido a los mal llamados productos ‘de desayuno’.
Hoy en día, gracias al avance en el estudio de la nutrición, se sabe que, en población general sin patologías, no existe una comida más importante que otra, ni un número de ingestas diarias ideal, siempre y cuando cubramos los requerimientos energéticos y nutricionales que necesitamos para mantener nuestra salud.
Y es que, lo que es verdaderamente importante es QUÉ COMEMOS. Por este motivo, la recomendación es que elijas siempre alimentos de buena calidad, nutricionalmente interesantes, que te proporcionen energía, fibra, vitaminas, minerales y los macronutrientes esenciales (proteína, carbohidrato y grasa).
Si decides desayunar, esta debe ser una ingesta más del día, por lo que tienes que comer comida. No existen productos específicos para el desayuno.
Todos tus platos deberían contener una buena ración de vegetales, de distintos colores, garantizando así variedad de vitaminas. Además, nunca debes olvidarte de la porción proteica, de vital importancia para la creación y regeneración de tejidos. Carnes, pescados, huevos, legumbres, embutidos con un alto porcentaje de carne… son todas ellas opciones con alto contenido en proteína.
Para un mayor aporte energético, y siempre ajustado a nuestro nivel de actividad física, podemos incluir carbohidratos como los granos enteros, el pan integral, o los tubérculos tipo patata o boniato.
Y no nos olvidemos de nuestras amigas ¡las grasas! Elige las de buena calidad como el aceite de oliva virgen extra, el aguacate o los frutos secos. Son esenciales para nuestra salud y mejoran el funcionamiento de nuestro cerebro.
Siguiendo este esquema y consumiendo las calorías diarias suficientes, no debería importar tanto la hora del día a la que comes.
No obstante, si me permites que te dé un consejo, cuando estamos tratando de mejorar nuestros hábitos y estilo de vida, algo que ayuda a muchas personas es iniciar la jornada tomando una decisión que esté alineada con ese propósito. En este sentido, realizar un desayuno completo, energético, nutritivo y que además nos aporte saciedad, evitando el posterior picoteo, puede ser una estrategia muy beneficiosa para lograr nuestro objetivo.
Así pues, desayunes recién levantado, te esperes un rato o incluso varias horas para hacerlo, lo más importante es la elección de alimentos que hagas. ¡Come comida!