Ana Azanza

Hambre física vs hambre emocional

Ana Azanza

Hambre física vs hambre emocional

05/09/2022

Todos sabemos por experiencia propia que el hambre o deseo de comer se nos presenta cuando llevamos unas horas en ayunas, pero también todos en algún momento hemos experimentado el hambre emocional, ese que nos lleva a comer por otros motivos diferentes a los meramente fisiológicos.

Diferencias entre hambre física y hambre emocional

El hambre física es aquella que nuestro organismo utiliza para avisarnos de que es hora de alimentarse, para cubrir las necesidades nutricionales y desempeñar sus funciones vitales.

Cuando comemos por hambre física:

  • Intervienen mediadores hormonales: grelina y leptina, insulina, glucagón..
  • Es una respuesta fisiológica al ayuno y el déficit de nutrientes
  • Comemos lo que nos ponen en el plato
  • Comemos en la mesa habitualmente y cuando toca
  • Nos saciamos con la comida
  • Nos produce satisfacción y serenidad

El hambre física también puede ser influida por:

  • las costumbres y horarios
  • una falta de grasas en la dieta
  • un exceso de glúcidos y sus consiguientes hipoglucemias
  • el consumo de productos saborizantes como el glutamato monosódico
  • la presencia de parásitos en el intestino
  • una superpoblación de cándidas en la microflora intestinal

El hambre emocional es el lenguaje del alma, de la parte psicológica de la persona y no responde a necesidades físicas sino a carencias o reacciones emocionales

Cuando comemos por hambre emocional:

  • Intervienen déficit de neuromediadores como la serotonina, catecolaminas…
  • Es una respuesta psicológica a estados de carencia: soledad, aburrimiento, frustración, estrés, insatisfacción, tristeza o vacío existencial….
  • Comemos alimentos que se nos antojan
  • Comemos en cualquier sitio y a cualquier hora
  • No nos saciamos nunca
  • Provoca culpabilidad

El hambre emocional también puede estar favorecida por:

  • el descontrol de horarios
  • Lo aprendido en la infancia: haber recibido consuelo o premio con comida
  • El exceso de trabajo y “sentimiento de necesidad” de energía
  • La abstinencia de fumar u otra adicción

Como controlar la hambre emocional – consejos

  • Beber mucha agua e infusiones e hidratarnos para no confundir hambre con sed
  • Comer alimentos grasos y con fibra que sacien, evitando los glucídicos y refinados
  • No comprar alimentos fáciles de comer sino que haya que cocinarlos
  • Hacer comidas saciantes con suficiente grasa y masticando bien.
  • Hacer ejercicio o yoga que relaje el sistema nervioso
  • Tomar jugos verdes entre horas cargados de magnesio y potasio
  • Revisar la causa y la finalidad que lleva a comer por ansiedad

Llevar una vida ordenada con sus horarios y su planificación de comidas y compra ayudará a no sentir hambre y necesidad de comer compulsivamente